Foto: Marc Barnils

Soy Jordi Folch Dàvila. Nací en Barcelona en 1976.

Gracias a la afición de mi padre por la fotografía empecé a tomar fotografías cuando todavía era un niño, con una vieja Rolleiflex de medio formato.

Estudié Imagen y Sonido en el EMAV de Barcelona y, más tarde, me especialicé en Fotoperiodismo en la escuela GrisART.

Durante unos meses estuve en Inglaterra perfeccionando mi inglés y allí hice mis primeras colaboraciones en la prensa local, en el Warminster Journal.

Más tarde empecé a trabajar para La Vanguardia Ediciones y todas sus revistas y suplementos. Esta tarea me dio la oportunidad de trabajar para la revista Interiores, una de las revistas de decoración más notorias de España y de América Latina.

Durante muchos años compaginé los reportajes de interiorismo con los de viajes, retratos y gastronomía en revistas como Quèfem?, Historia y vida, Descubrir Cataluña, Playboy, Súpers, Foodie Culture Barcelona, ​​RACC o varias guías de viajes.

Más tarde me convertí en jefe de fotografía de la agencia Engels & Volkers, una oportunidad que me permitió especializarme en la fotografía de casas de lujo y conocer a multitud de arquitectos, constructores e interioristas. Este hecho me permitió continuar la labor de fotógrafo como freelance.

Actualmente trabajo para diversas firmas relacionadas con el mundo de la arquitectura, el interiorismo y la decoración (Vilablanch, Mínimo, Bulthaup, Azul Acocsa, Bonavista, Bauhaus, Alcampo, Roldán Berenguer o Nexdom) y para agencias inmobiliarias de lujo (Lucas Fox, VDB o Kretz, esta última con mucho éxito en Francia por su reality en Netflix “Negocio Familiar”).

Sigo publicando reportajes en revistas de interiorismo, tanto en papel como en digital, como AD, Interiores, El Mueble, Hola o Houzz (la plataforma online líder en el sector del diseño, la arquitectura, la decoración y las reformas del hogar). Mis reportajes han sido editados en países como Japón, Singapur, Estados Unidos, Italia, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Nueva Zelanda o Australia.

En 2022 fui finalista en los premios LUX de fotografía de arquitectura e interiorismo.

Uno de los motores de mi vida, aparte de mi familia, es la pasión por el trabajo bien hecho.

Mis fotografías son una buena muestra de ello.